miércoles, 24 de agosto de 2011

For sale de Joan Bernal, por G. A. Chaves


Al igual que la mayor parte de quienes escriben poesía hoy en Costa Rica, Joan Bernal prefiere los temas cotidianos y el lenguaje directo. Lo que distingue a sus poemas, sin embargo, es la íntima vinculación emotiva (carente de ironía protectora) entre el hablante y sus temas. ¿“Qué clase de poeta / se inspira en un paraguas”?, pregunta alguien en la sección inicial del libro. La respuesta es: el mismo que aún se asombra cuando bebe agua, cuando observa los colores de la bandera, o cuando se para a pensar sobre los afectos y resistencias que provoca la gente (“En las vacaciones / cuando nos preguntan / decimos: Ah muy linda / una playa sin gente / un lugar sin gente”); el mismo poeta que saca tiempo para repasar en poemas a sus familiares y su afición por el Deportivo Saprissa.

Joan Bernal escribe sobre lo que le importa, y eso lo ha convertido en un poeta a un tiempo urgente y entrañable. Con For Sale, Joan Bernal ha venido a confirmar las predicciones que le granjearon sus libros anteriores: es un autor mayor e ineludible en el mapa de la poesía costarricense contemporánea.

Una contratapa para Alfredo Trejos por Luis Chaves

En Vehículos pesados, su más reciente entrega de poemas, Alfredo Trejos, camuflado detrás de los arbustos de una especie de neobarroco falso, refina el estilo confesional que lleva su apellido. Trejos regresa a la tradición pero por otro camino. Más que la inercia lírica, este autor prefiere explorar el poder de la palabra no por lo que dice sino por lo que hace. 

Un crooner que por las noches es el contador del desencanto. En sus libros contables hay un poco de fuego en un sobre cerrado. Al leer a ciertos autores uno piensa: me gustaría escribir así. Después de leer a Alfredo Trejos uno dice: me gustaría sentir así.